- El tiempo de la pandemia también ha sido una oportunidad para salvar a diversas especies, entre aves, mamíferos y reptiles que circulan por distintas áreas metropolitanas y frenar la comercialización de la fauna silvestre.
- Jóvenes del municipio de Marcala, dan ejemplo de protección de la vida silvestre al rescatar, curar y liberar a un venado herido.
Tegucigalpa, 11 de agosto de 2020. Guaras, loras, iguanas, tortugas y hasta un tigrillo son algunos de los animales que han sido rescatados por diferentes instituciones públicas, privadas y sin fines de lucro, entre marzo y julio de 2020, durante la Emergencia Nacional por la COVID-19.
El mismo buen ejemplo dieron un grupo de cuatro jóvenes del barrio San Francisco, del municipio de Marcala, La Paz, que se encargaron de curar a un venado hasta recuperarlo y liberarlo. El animal silvestre presentaba heridas en sus piernas y pezuñas por disparos de supuestos cazadores.
Y es que aún con las labores de urgencia frente a la pandemia, también se ha abierto la oportunidad para salvar a miles de aves, mamíferos y reptiles que habitan en distintas áreas metropolitanas y evitar su comercialización.
En los últimos días, fue rescatado un tigrillo en la cordillera de Mico Quemado, aldea Montes de Olivo, El Progreso, Yoro, donde miembros del Cuerpo de Bomberos se empeñaron en recuperar al felino con vida y luego fue entregado al personal del Instituto de Conservación Forestal (ICF).
En aporte a las labores coordinadas con el ICF, la Secretaría de Defensa Nacional–SEDENA ha destinado fondos anuales para el programa militar enfocado a la conservación del hábitat natural, a través del Centro de Rescate, Rehabilitación y Liberación de Fauna Silvestre del Comando de Apoyo al manejo del Ecosistema y Ambiente (C-9).
En el centro se cuidan a varias especies silvestres entre ellos, felinos y aves como guaras, loras y reptiles como las Iguanas, que estuvieron en cautiverio para luego ser liberadas.
Rehabilitación
El estado físico de cada animal rescatado es revisado bajo estrictos mecanismos de bioseguridad y protección por personal especializado, entre biólogos y médicos veterinarios del programa militar.
De forma posterior, el animal silvestre, pasa a una fase de cuarentena donde se evalúa el comportamiento, costumbres al comer o si se auto-lastima y mediante un análisis clínico-veterinario se determina la factibilidad de integrar al animal junto a otros de su misma especie o por separado.
Liberación
De febrero a la fecha con el programa militar se ha logrado retornar a su hábitat natural a 54 animales silvestres en el departamento de Valle, con el acompañamiento de personal de la Fiscalía Especial del Medio Ambiente y el ICF.
Entre los animales liberados están 20 iguanas, 10 tortugas de tierra, 10 pericos del Pacífico, siete pericos guayaberos, cuatro mapaches y tres pericos zapoyoles.
Actualmente están albergados 75 animales silvestres y domésticos en el C9, de los cuales algunos fueron decomisados y otros donados
A diario las unidades militares realizan patrullajes acuáticos y terrestres con el fin de proteger la fauna y flora. De igual manera vigilar los espacios naturales para evitar la caceríade animales silvestres, los incendios forestales, el gorgojo descortezador y la plaga de la langosta voladora.
Siembras nacionales
Previo a finalizar el año 2020 SEDENA contará con el Informe sobre los alcances de la masiva reforestación nacional que se ha realizado a lo largo del año con las plantas provenientes de los mega- viveros que se han construido en instalaciones militares.
El reto de siembra de este año, es de 2.5 millones de árboles a nivel nacional que continúa a la par de la asistencia a la emergencia sanitaria COVID-19. Hasta el mes de julio la siembra registrada sobrepasa un millón 352 mil plantas de diferentes especies.
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